Exigiendo «piso parejo» y se les permita seguir trabajando para poder generar recursos de los cuales dijeron, dependen miles de trabajadores, alrededor  de 60 comerciantes establecidos y vendedores ambulantes  de esta Capital se manifestaron este viernes ante las oficinas de la Coepris.

A través de cartulinas con leyendas como «No me obliguen a robar queremos trabajar», «Necesitamos comer», «No al cierre de negocios», «Los locatarios ya no aguantamos otro cierre», los comerciantes y empleados mostraron su desacuerdo con la medida implementada por las autoridades gubernamentales que impide a las empresas no esenciales mantener abiertos sus comercios.

Para llevar a cabo su protesta, los manifestantes realizaron un plantón bloqueando la circulación vehicular sobre bulevar Tamaulipas frente a las oficinas de la Comisión Estatal para la Prevención Contra Riesgos Sanitarios (Coepris).

Debido a la protesta se vio afectada la circulación vehicular sobre el bulevar Tamaulipas en el tramo comprendido entre las calles Olivia Ramírez y Felipe Berriozábal, situándose patrullas de la Policía Estatal y de Tránsito municipal para resguardar el lugar de la protesta.

Los quejosos manifestaron su inconformidad ante el cierre de sus establecimientos, señalando que después de tres meses sin actividad ya que tuvieron  sus negocios cerrados, ahora están a punto de la quiebra.

Lamentaron que aún 
cuando han estado cumpliendo con las medidas sanitarias en sus comercios, como es el uso de gel desinfectante, tapete sanitizante y señalética para la sana distancia, ahora se decreta el cierre de todos sus negocios.

Además señalaron, la problemática viene del propio ciudadano al no querer usar cubrebocas.

“Aceptaban a regañadientes, si no traían tapa bocas no podrían entrar, la gente que no traía cubre bocas en la calle, al llegar a un negocio se alinea”:

Los comerciantes recordaron que hasta la fecha no han recibido  los apoyos ofrecidos por el Gobierno del Estado como despensas y financiamientos, y sin embargo, cuando todavía no les llega ningún tipo de apoyo ahora en cambio están siendo obligados a cerrar nuevamente.

“De qué vamos a comer, cómo vamos a mandar a los hijos a la escuela, sino tenemos ingresos, en cambio el gobierno sí cobra agua y luz, también hay que pagar renta”, manifestó uno de los manifestantes.

Uno de los comerciantes inconformes, Perry Smith,  quien formó parte de una comisión que entró a dialogar con funcionarios de Coepris, a su salida del encuentro  manifestó que no se llegó  a ningún acuerdo.

«Voy a buscar el diálogo con el Secretario General de Gobierno el lunes allá nos vemos el lunes como a las 10:00 , 11:00».

«Muchos hogares victorenses van a quedar en la chilla», recalcó.

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