En México existen unas 400 mil heladerías, las cuales parecerían tener copado el mercado. Sin embargo, la alta concentración de estos negocios en las grandes ciudades y el bajo consumo percápita hacen creer que en este rubro no todo está escrito.
“Los mexicanos consumen de dos a tres litros de helado al año, aproximadamente. Se trata de un índice bajo si se compara con países que incluso son de climas mucho más fríos, como Nueva Zelanda, Suecia, Dinamarca o Estados Unidos”, dice José Medina, CEO de Deiman, empresa mexicana de saborizantes y colorantes para la industria alimenticia.
El gran campeón del consumo de helado en el mundo es Nueva Zelanda, con la cifra inalcanzable de 28.4 litros de helado por persona, por año. Le sigue Estados Unidos (20.8), Australia (18), Finlandia (14.2) y Suecia (12) para completar el top 5 mundial.
“Es un producto que te gratifica como consumidor. En muchos casos nutre, incluye elementos positivos y se convierte en un buen vehículo para probar nuevas frutas y mezlcas. Cosas con las que uno quisiera aventurarse. Es algo que cubre muchas necesidades y te da algo valioso”, explica Medina.
Sin embargo, es claro que en el país persisten las heladerías tradicionales, con perfiles poco innovadores o que prefieren no arriesgar ante un mercado desconocido. Ahí es donde se aprecia una buena oportunidad para el emprendedor que quiere apostar por algo más novedoso. Tan sólo Deiman ofrece más de 4 mil sabores dedicados a los helados.
Un mercado rico en oportunidades
El actual mercado del helado también ha generado una oferta que, aunque no sea la más original, sí es la que espera prácticamente por default el consumidor. Debido a ello, la recomendación de Medina es, antes de innovar, asegurarse de mantener los productos para el mercado que ha sido educado por lo convencional, para posteriormente darse a la tarea de generar un diferencial de marca.
Un ejemplo son los sabores fresa, vainilla, napolitano y algunas combinaciones con galleta, así como otras opciones como zarzamora y pistache. “En cuestión de tendencias e innovaciones, se pueden encontrar combinaciones y usos de nuevas técnicas y recursos. Tenemos el uso del nitrógeno, la esferificación, los toppings (coberturas especiales)”, asegura el especialista.
La originalidad dentro del negocio heladero ha llevado a algunos emprendedores a crear sabores que mezclan incluso con bebidas alcoholicas, mientras que Medina recomienda tomar en cuenta todas las tendencias para lograr un negocio único y atractivo.
“Ahora mismo también hay una tendencia de utilizar sabores salados: tocino, maíz… Son sabores que no te imaginas en un helado, pero que si se combinan con algún otro elemento, como la piña, obtienes un resultado positivo”, abunda el especialista.
El mercado del helado en México tiene en sus índices bajos, pero de rápido desarrollo (se calcula un crecimiento de 12% anual en el sector), la oportunidad de ser parte de un negocio en expansión. La innovación es una de las llaves para sostener estos números.
De acuerdo con Medina, además se trata de un negocio que no implica una inversión tan alta: alrededor de 60 mil pesos para equiparse con lo básico y empezar a vender cuanto antes. Los cambios de temporada, además, no deben ser vistos como un obstáculo, sino como una oportunidad para mejorar los productos.
“Efectivamente, hay que dar ciertas alternativas, porque si la gente busca en invierno un café, no está de más tener esa disponibilidad”, previene. En cuanto al local, lo mejor es buscar espacios donde se registre alta circulación de peatones, principalmente. De igual forma, los epicentros comerciales ayudan mucho, sobre todo cuando hay tiendas de un estatus medio-alto, pues los consumidores están acostumbrados a buscar opciones económicas en cualquier lugar.
¿Todavía sigues dudando?
Algunos innovadores del mercado del helado que han registrado un éxito que los ha posicionado son:
Helado Obscuro: Combinación de sabores dulces y tradicionales con un toque de la bebida que pedirías en el bar.
Ice Cream Nation: Firma que lanzó al gran público la oferta de helados y malteadas con nitrógeno líquido.
Moyo: Helados de yogurth natural con una promesa healthy: incluye una buena dosis de lactobacilos en cada cucharada.
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